Seleccionar página

NO ME QUIERO ATAR

9 Dic, 2018

Es como si se tratara de un verdadero disparate.
¿Atarse? No puede resultar más negativo, más limitador de absolutamente todos mis movimientos… Y este es el mensaje, no solo en las marquesinas sino en todas partes.
Hace ya mucho tiempo que esto del compromiso vende poco y vende mal. Vende poco porque nadie quiere verse recortado en sus capacidades, iniciativas, etc. y vender mal porque cuando se habla del compromiso siempre se alude a su parte más negativas como algo que te comprime que te constriñe, que te impide ser libre.
Y sin embargo el compromiso es algo grande en la relación de pareja.
De hecho es lo que le hace crecer, robustecerse, construir sobre cimientos sólidos, dar y exportar seguridad y amor.
Porque comprometerse es elegir, y uno elige lo que quiere.
Uno elige a quien quiere, y elige a quien quiere más para ser compañeros toda la vida. Ese es el verdadero núcleo del compromiso: poner en el número uno de tu prioridad para todo y en todo en la vida, a la persona que has elegido para envejecer juntos. Y esto hecho a la recíproca, que es de lo que se trata, tiene una fuerza colosal. Saber que alguien a quemado las naves por ti… Puede más que todo. Incluso que una marea en contra que no hace más que decirnos que debemos mirarnos mucho al espejo y decirnos chico tu si que vales.
No me quiero atar.
Pues no te ates, peor para ti, no sabes lo que te pierdes.
Es una gozada crear un hogar junto a la persona que quieres. Y un hogar es cosa sería. No se me ocurre mejor proyecto que dos personas puedan poner juntas en marcha.

Quizá también te interese…

Pareja antes que padres

Pareja antes que padres

Aquí vuelvo con uno de mis puntos más repetidos, seguro, pero en los que creo firmente y es que nosotros dos somos lo más importante, el uno para el...

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *